Estad Quietos y Conoced que Yo Soy Dios Por Francis Frangipane

(English)
Entre todas las complejas y sublimes facultades del alma humana, un atributo funciona como siervo de todos: el alma del hombre es porosa. Quiere decir que además de los talentos y áreas fuertes, el alma es también formada y desarrollada por estímulos externos: aprendemos costumbres y lenguajes, hábitos, virtudes y vicios  en gran manera importándolos de la realidad que nos rodea. Ciertamente la medula de la vida misma, como la conocemos subjetivamente, es creada por el fluir interior de estas realidades externas.

Así, el alma, aunque nace con un poder innato,  es también el producto de su tiempo y circunstancias. Debido a que vivimos en tiempos proféticos sin precedentes, los individuos nacidos durante las últimas cinco o seis décadas son impactados, no solamente por las luchas y alegrías comunes de la vida, sino asimismo por los inexpresables desastres que ocurren alrededor del mundo. Como resultado de la cobertura en vivo de los medios de comunicación, experimentamos a través de la experiencia de otros repetida  participación con el sufrimiento humano. Vemos los reales rostros de aquellos traumatizados por terremotos y tsunamis, hambres y guerras. Nuevamente, debido a la naturaleza porosa del alma, cuando observamos los terrores de la vida, estamos absorbiendo una y otra vez estas atemorizantes realidades dentro de nuestras consciencias. No podemos evitar sino ser afectados.

¿Como borramos de nuestras mentes las caras de las victimas de terremotos y tsunamis? ¿Como es posible olvidar la horrenda memoria de personas saltando hacia su muerte desde las ardientes ventanas de las Torres Gemelas el 11 de Setiembre? ¿Que le ocurre a nuestras almas cuando vemos nuevos reportes de Iraquíes e Israelitas siendo volados por bombas terroristas?

Si usted es un intercesor, o incluso alguien quien posee simplemente básica compasión humana, el diluvio de sufrimiento y terror  proveniente de terribles desastres no puede ser detenido por un dique de intelecto humano. Los dolores de la vida, incluso cuando no son los nuestros propios, todavía son absorbidos dentro de nuestra alma, y mas aun si conocemos a quien esta sufriendo.

Para arreglárnosla con nuestras vulnerabilidades, hemos creados algunas soluciones positivas: hospitales, agencias de ayuda,  primeros auxilios y caridades todos relativamente nuevos medios de lidiar con el sufrimiento humano. Somos impulsados, no solamente a ayudar a las victimas, sino a ayudarnos a nosotros mismos a digerir y responder a  la sobrecarga emocional de nuestros tiempos.

Los Medios de Comunicación Manipulan Nuestros Temores
Es importante recordar que  la meta principal de las noticias no es comunicar las noticias presentes sino generar dinero al hacerlo. Así, incluso historias menores frecuentemente son sensacionalizadas para captar a los televidentes. Yo, por ejemplo, estoy cansado de los escándalos ampliamente publicitados y de las fallas morales en los líderes, sean políticos o religiosos. Si no tengo cuidado, la inundación de estas realidades pueden desgastar mi corazón, endurecer mi alma y hacer de mi un cínico.

 Sumado a estas cosas  a diario se nos recuerda sobre las actuales presiones económicas, mas las amenazas de enfermedades, el avance del crimen  y el caos en nuestras comunidades. Nuestras almas se agitan con las noticias. ¿Como puede un simple hombre lidiar con las atemorizantes condiciones del mundo?

Engrandeced al Señor
Es aquí, en este valle de presiones, conflictos y miedos que habrá santos abandonando la carrera. Aun así, es también aquí que el buscador de Dios es conducido más cerca del Señor.

El Salmista clama, "¡Engrandeced a Jehová conmigo!" (Sal. 34:3).Cuanto mas cerca estamos de Dios, mas se nos infunde de Su fuerza. Puede que el mundo a nuestro alrededor no mejore, pero a través del Espíritu Santo, ganamos nuevas fuerzas.

En Su presencia, los demonios de nuestro mundo se reducen proporcionalmente. Amados, precisamente en estas circunstancias, ¡engrandezcamos a Jehová! Hemos leído los capítulos finales: ¡Toda rodilla se doblara y toda lengua confesara que Jesucristo es el Señor! (Ver Filipenses 2:10-11).
Cuando nuestros enemigos se multipliquen y las presiones se amotinen, retírate--- sí, retírate a la fortaleza de Dios. ¿Esta usted ansioso? ¿Temeroso? Recuerde: “El que mora en los Cielos se reirá” (Salmo 2:4). ¿Esta siendo usted acusado por el enemigo? Nuevamente, el Señor dice " En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza" (Isa. 30:15). Cuando el acusador venga a encarcelarlo en su pecado, vergüenza y arrepentimiento, usted no tiene que defenderse. Usted tiene el derecho de permanecer callado. Dios mismo ha nombrado un abogado para usted, y es Su propio Hijo, el Único que murió por sus  pecados.

No magnifique sus problemas; sea Dios exaltado en toda la tierra. No permita que sus incrédulas palabras agoten su alma de vida, porque cuanto mas habla, más paz pierde. Sea lento en hablar. Antes de que pueda aprender a hablar para Dios, debe aprender que cosas NO hablar. Esta batalla no es acerca de las difíciles circunstancias que lo rodean;  es acerca de escuchar al Señor, escuchar lo que El pretende hacer, y luego seguirlo a la victoria.

Recuerde, querido amigo, las palabras del apóstol Pablo: “Por nada estéis afanosos.”  La verdadera batalla que esta enfrentando no es una de acción, sino de dirección: usted debe ascender verticalmente para tener éxito horizontalmente.  Establezca su alma en Dios y  establecerá victoria en su vida. En la presencia de Dios, la  porosa naturaleza del alma humana es una gran ventaja. Podemos escaparnos del estrés de la vida. ¡Podemos en realidad ser saturados con la restauradora sustancia de Dios!

Salmo 46
Dios es nuestro amparo y fortaleza,
Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida,
Y se traspasen los montes al corazón del mar;
Aunque bramen y se turben sus aguas,
Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah

Del río sus corrientes alegran la ciudad de Dios,
El santuario de las moradas del Altísimo.
Dios está en medio de ella; no será conmovida.
Dios la ayudará al clarear la mañana.
Bramaron las naciones, titubearon los reinos;
Dio él su voz, se derritió la tierra.
Jehová de los ejércitos está con nosotros;
Nuestro refugio es el Dios de Jacob. Selah

Venid, ved las obras de Jehová,
Que ha puesto asolamientos en la tierra.
Que hace cesar las guerras hasta los fines de la tierra.
Que quiebra el arco, corta la lanza,
Y quema los carros en el fuego.
Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;
Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.
Jehová de los ejércitos está con nosotros;
Nuestro refugio es el Dios de Jacob. Selah

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